El rendimiento de un trabajador de cualquier oficina está en proporción directa con el grado de confort en el que desempeñe su labor. Ejecutar tareas repetidas durante largos periodos de tiempo, una disposición inadecuada del lugar de trabajo, una postura incorrecta del cuerpo y los hábitos de trabajo deficientes, pueden producir cansancio y lesiones físicas crónicas en nervios, tendones y músculos.
Por ello, es importante que el trabajador conozca algunas recomendaciones para aumentar al máximo la comodidad y reducir el riesgo de lesiones:
1.- Asegúrese de que la organización del espacio de trabajo es la adecuada
• El teclado y el monitor deben estar frente a usted con la vista recta.
• Asegúrese de mantener los codos cerca del tronco, para utilizar el mouse estos no se deben separar demasiado el uno del otro. También ajuste la silla y la mesa de manera que el teclado y el mouse queden a la altura de los codos o por debajo de ellos.
• Mantenga los pies sobre una superficie firme y los hombros relajados.
• Disponga los materiales en el escritorio de acuerdo con su frecuencia de uso:
• Frecuente: colóquelos lo más cerca posible.
• Ocasional: colóquelos al alcance del brazo.
• Poco frecuente: colóquelos en un lugar más alejado, pero práctico.
2.- Mantenga posición cómoda y relajada mientras trabaja.
• Deje caer los brazos a ambos lados del cuerpo durante unos segundos y estírelos para relajarlos.
• Intente mantener la sensación de relax mientras trabaja.
• Si utiliza un descansabrazos, limítese a usarlo durante las pausas al escribir. No lo utilice mientras escribe, ya que esto puede aumentar la tensión ejercida sobre las manos y, por tanto, el riesgo de lesiones.
• Al utilizar el teclado o el mouse, procure no colocar las muñecas sobre los bordes angulosos del escritorio.
3.- Ejercite hábitos de trabajo adecuados
• Haga descansos frecuentes; procure levantarse y andar un poco al menos un par de veces cada hora.
• Cambie de tareas a lo largo del día. Trate de minimizar la cantidad de movimientos repetitivos o forzados.
• NO ejerza presión sobre el teclado ni sujete el mouse con demasiada fuerza.
4.- Manténgase alerta ante posibles indicios de cansancio
• Ante cualquier síntoma de dolor, rigidez, hormigueo, debilidad, inflamación, quemazón, calambre o engarrotamiento de manos, muñecas, brazos, hombros, cuello o espalda, consulte a su médico y evite automedicarse.
Fuente. www.loredomuebles.com